domingo, 24 de noviembre de 2013

Adiós mi querido amigo Alberto.

Hoy vuelvo a escribir acá con todo el dolor que me embarga al conocer que un amigo se acaba de morir, son pocas las palabras que tengo para expresar el dolor infinito que siento con su partida. El dolor y la confusión que siento por su forma de morir, no las podre comprender en un largo tiempo.

Los buenos momentos que pase a su lado fueron inolvidables, el apoyo que me presto en mis épocas mas oscuras fue invaluable. Es difícil creer que ya no nos acompaña en este viaje que es la vida, siempre buscaba en él un buen consejo, ahora he perdido una parte de mi que nunca podre reemplazar.

Adiós mi querido amigo Alberto, nunca te olvidare y siempre te llevare en mi alma.

miércoles, 26 de junio de 2013

Tempus fugit

Se cumplieron tres años desde que partió la persona con la que pase 7 años de mi vida, con quien viví momentos inolvidables, estos tres años han sido difíciles pero poco a poco he podido centrar mi vida de nuevo.

La persona con la que estoy saliendo hace poco más de un año se ha convertido en mi ancla a tierra, una persona que me ha hecho pensar sobre mi vida y como me estaba dejando llevar por los placeres hedonistas. Gracias a el he descubierto que es mucho más interesante quedarnos en casa a ver una película que salir y rumbear sin sentido, aunque no he dejado de salir por lo menos ya no lo hago cada 8 días, algo que me ha permitido descubrir el mundo más allá de ese bar que se llama colosos, lamento profundamente haber desperdiciado mi tiempo y dinero en ese sitio durante estos años. No me arrepiento de haber ido, de ayudarlos a surgir cuando eran un bar de lesbianas y no entraba ni un oso, pero si reconozco que hace rato que debí haber dejado de ir, no le hice caso a muchas personas, hasta que me paso lo peor a manos de sus dueños, he quedado sordo por una disputa de 3 mil pesos de una gaseosa lo cual es increíble pero cierto, nunca pensé que esto me fuera a pasar a mi pero me paso y lamento no haber oído a todas las personas que me advirtieron que el sitio estaba en franca decadencia, pero c'est la vie así que debo seguir adelante con el apoyo de mi pareja, a quien cada día quiero más por todos los pequeños detalles que tiene conmigo. 

En estos días murió un gran amigo a quien yo quería mucho, poco nos habíamos visto desde que partió de Bogotá pero lo llamaba en fechas especiales y manteníamos el contacto, me duele no haber estado ayudándole en sus últimos días pero siempre lo llevare en mi corazón, y José espero que estés en paz y que todo el sufrimiento de tus últimos días en la tierra haya pasado y estés siendo uno con Dios, adiós mi gran amigo nos vemos más tarde del otro lado.